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viernes, 5 de junio de 2020

Naturaleza (Vicente Merlo)

Hemos empezado con la palabra (quizá no sólo con ella). Acaso todavía no hemos comenzado y hasta aquí era sólo una introducción para iniciar ahora el silencio consciente. Sería un modo de aproximarnos a la experiencia de la meditación, sin duda uno de los aspectos de Oriente que ha fascinado a muchos occidentales. Permitamos, pues, que el Silencio de la Meditación habite en nosotros durante estos instantes.
En una primera etapa, el Silencio aparece como algo opuesto a la palabra y el pensamiento: su antítesis. Conviene dejar de estimular el proceso de pensamientos y de palabras para saborear el Silencio. Esto es la esencia de la meditación oriental. Justamente, la definición más clásica de yoga, ofrecida por Patañjali al comienzo de los Yoga-sûtra, dice: "yogash citta vritti nirodha" el yoga consiste en el cese de los movimientos de la mente. Es el silencio de pensamientos, el silencio mental.
Esto no equivale (como el buen Hegel 'pensaba') a una especie de torpor, somnolencia o caída en la inconsciencia. Al contrario, se trata de mantenerse muy despierto, muy consciente, con la mente iluminada, precisamente en ausencia de pensamientos. Entonces se revela la diferencia entre la "mente" ("los procesos mentales") y la conciencia (la lucidez silenciosa).
Merece la pena recordar el siguiente aforismo de Patañjali (YS I,3), pues expone el resultado de lograr el silencio de la mente. "Entonces -dice el sabio hindú- el purusha, el vidente, se establece en su verdadera naturaleza". Nuestra naturaleza más profunda se revela (se desvela) cuando dejamos de identificarnos con las sensaciones, las emociones y los pensamientos. En ese momento brilla el yo interno, el ser autoconsciente, el espíritu (purusha) en todo su esplendor. Brilla porque es un ser de luz, de conciencia gozosa.

Naturaleza (Vicente Merlo)

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La fascinación de Oriente
Vicente Merlo (Valencia, 1955)

Editorial Kairós, 2002

Este libro ameno, mágico y profundo analiza las múltiples facetas de un fenómeno recurrente en el mundo occidental: la fascinación de Oriente y por Oriente. El autor, fascinado él mismo por la riqueza del pensamiento y la sensibilidad orientales, reflexiona sobre cuestiones de gran calado tales como el yoga, la meditación, los maestros espirituales, la estética o la muerte. Todo ello a la luz de la sabiduría de la India, de la que Vicente Merlo es un aclamado conocedor y divulgador.
La fascinación de Oriente dedica asimismo algunos capítulos a autores que, como Ken Wilber, Raimon Panikkar o Carl G. Jung, han sido influenciados de manera determinante por las filosofías índicas, convirtiéndose en mediadores indispensables entre Oriente y Occidente.
El presente libro apremia a reflexionar acerca de la posibilidad y hasta la necesidad de integrar la filosofía oriental en nuestras vidas, tomando la meditación silenciosa como hilo conductor.

lunes, 20 de agosto de 2018

Presencia (Lama Jigme Rinpoche)

Cuando estamos listos, suficientemente relajados y distendidos, entonces comenzamos a meditar. Para hacerlo, adoptamos primero la postura adecuada. En efecto, la posición correcta del cuerpo "cierra" los canales por donde circula la energía (o aliento) de las emociones perturbadoras y "abre" los canales por donde circula la energía de las cualidades positivas de la mente. La tradición tibetana detalla la "postura en siete puntos" que indica cómo colocar las piernas, los brazos, las manos, la espalda, la cabeza, etc. Esta posición no es indispensable para poder meditar, pero le permite a la mente estar de manera natural más libre, más calmada, y establecerse mucho más fácilmente en el estado meditativo: proporciona el "confort" de la meditación. Para los principiantes, lo más importante es tener la espalda bien recta.
Cuando entramos en la meditación propiamente dicha, permanecemos tanto como podemos en el estado de lucidez que he evocado anteriormente. No se trata únicamente de concentrarse en el sentido ordinario del término, ni de alcanzar un estado particular, ni de percibir algo especial. Simplemente, descansamos en una presencia viva, a la vez que somos plenamente conscientes. Así, como he dicho en todo momento, distinguimos claramente todo lo que se produce tanto en el interior como en el exterior, pero no perdemos el hilo de Ariadna de la meditación, mantenemos esta "presencia consciente".
No es algo tan simple como parece, ya que no estamos habituados a ser realmente conscientes del funcionamiento de nuestra mente y de nuestras reacciones al entorno. Por lo tanto, mantener esta "presencia" requiere de un aprendizaje, de un cierto entrenamiento. En efecto, percibiremos como, al cabo de unos minutos, quizá algunos segundos, nos dejamos arrastrar. No me cansaré de repetir que esta atención consciente es meditar. Es la puesta en practica de la vigilancia y del "recuerdo" lo que permite que no nos "perdamos".

Presencia (Lama Jigme Rinpoche)

 
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El monje y el lama

Dom Robert Le Gall (Saint-Hilaire-du-Harcouët, Francia,26 de febrero de 1946)
Lama Jigme Rinpoche (Kham, Tíbet, 1.949)

Fundacion Filokalia, 2002


Dom Robert Le Gall es monje benedictino y abad de Sainte-Anne-de-Kergonan, en Bretaña, y el Lama Jigmé Rinpoché, vivió la expulsión de Tibet por parte de China y es responsable del Ghagpo Kagyu Ling de la Dordoña, el mayor centro budista francés.
Cada uno de los entrevistados, en el más puro diálogo conversan sobre temas tales como Dios o el absoluto; Jesús, Buda y sus mensajes; el ser humano y el sentido de la vida; la felicidad; el mal; qué hay tras la muerte; cómo rezar o meditar; cómo se entiende la salvación y cuánto hay de común y de divergente entre estas dos grandes doctrinas espirituales.

domingo, 28 de mayo de 2017

Maestro (Yogui Bhajan)

En los últimos años Occidente se ha inundado de maestros, gurus, swamis, yoguis, avatares, etc. Muchos guías sinceros han venido de Oriente para compartir sus conocimientos y llenar este vacío de guía espiritual que existe en nuestras tierras. Emocionados ante la presencia de hombres de tal sabiduría y paz, muchos alumnos caen víctimas de su propia tendencia a identificar a este hombre como un Ser Supremo (como el fin a alcanzar y no como el guía hacia el fin). Adoran la personalidad y no el espíritu del guía. El maestro es como una gasolinera, cuando el depósito está vacío lo llenas, pero no te llevas la gasolinera contigo. El maestro te libera de la duda y la oscuridad, reenciende la luz de tu espíritu y te dirige hacia el buen camino.
Existen dos tipos de maestros. El primero es como la máquina de un tren, a la cual se enganchan los demás vagones que le siguen moviéndose dependientes de él. El otro tipo de maestro es como un buen mecánico. Cada coche tiene su propio motor y no puede conducirse a si mismo. Si hay averías entonces vas al mecánico para repararlas y poder llegar a destino, al mismo tiempo que él les va enseñando cómo efectuar las reparaciones ellos mismos para el futuro.
La relación entre discípulo y maestro es de total libertad. Ante cualquier dificultad, duda o confusión que el alumno tenga, sabe a quien dirigirse. Todo ser humano tiene la necesidad de confiar totalmente en otra persona. Esta es la función del maestro, alguien a quien puedes acudir, que sabes que tendrá la paciencia necesaria contigo, una mente imparcial y libre de prejuicios con quien podrás hablar con toda confianza y que te dirá la Verdad clara y honestamente.
Cuando acudes a un maestro su primer deber es escucharte, empatizar con tu problema. Después, a través de su capacidad meditativa, él tendrá que medir tu capacidad de escuchar y entonces comenzará a hablar contigo. A esto se le conoce como "lucha libre espiritual". El maestro te dará inicialmente una buena batalla, de manera que puedas liberar tu  tensión mental y relajarte, y así abrirte a escuchar y comprender la Verdad.

Maestro (Yogui Bhajan)
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Kundalini Yoga
Yogui Bhajan
(Gujranwala -India-, 26 de agosto de 1929 - Española -Estados Unidos-, 6 de octubre de 2004)

Editorial Alas, 1983


Este libro ofrece las técnicas y las enseñanzas para alcanzar un perfecto equilibrio físico y mental. Un yoga teórico y muy práctico para la nueva era.
Yogui Bhajan fue el máximo exponente de la antigua ciencia del Kundalini Yoga en el mundo. Doctor en psicología y Director Espiritual de la Fundación 3HO. Nacido en la India, fue reconocido como Maestro de Kundalini Yoga a la edad de 16 años y medio. Vino a Occidente en 1969 para compartir sus enseñanzas y conocimientos del Yoga y la naturaleza espiritual del Hombre, y desde entonces se ha convertido en Maestro y guía espiritual de miles de personas. 
Residió  en Los Ángeles, California, aunque pasó la mayor parte de su tiempo viajando e impartiendo cursos de Meditación y Tantra Yoga Blanco. Enseñó las posturas, las Kriyas, meditación y Mantras, el procedimiento para practicar el Kundalini.

sábado, 10 de diciembre de 2016

Unidad (Mircea Eliade)

Es importante subrayar este hecho: sea el que sea el nivel al que se realiza, la conjunción de los opuestos representa la superación del mundo fenoménico, la abolición de toda experiencia de dualidad.
Las imágenes utilizadas sugieren el regreso a un estado primordial de no-diferenciación: la unificación del Sol y la Luna traduce la "destrucción del cosmos" y, en consecuencia, el regreso a la Unidad original. En el hathayoga, uno se esfuerza por obtener la "inmovilidad" del hálito y del semen; se habla incluso del "retorno del semen", es decir, un acto paradójico, imposible de lograr en un contexto fisiológico "normal", perteneciente a un cosmos "normal". En otros términos, el "regreso del semen" traduce, en el plano fisiológico, la "trascendencia" del mundo fenoménico, el acceso a la libertad. No es más que una aplicación de lo que se denomina "ir contra corriente" (ujana sadhana) o del proceso "regresivo" (ulta) de los Natha-siddha, implicando una "inversión" total de todos los procesos psicofisiológicos. En el fondo es la misteriosa paravrittti, ya documentada en los textos mahayanistas, y que en el tantrismo también designa el "retorno del semen". El "retorno", la "regresión", implican -en quien las realiza- la aniquilación del cosmos y, en consecuencia, la "salida del Tiempo", el acceso a la "inmortalidad". En el Goraksa-viyaja, Durga ("Shakti, Prakti") se dirige a Shiva en los siguientes términos: "¿Cómo es posible, Señor, que tú seas inmortal, y que yo sea mortal? Revélame la verdad, Señor, ¡para que yo también pueda convertirme en inmortal!" Es en esta ocasión cuando Shiva revela la doctrina hathayoga. Así pues, la inmortalidad no puede obtenerse más que deteniendo la manifestación, el proceso de desintegración; hay que ir "contra corriente" y reencontrar la Unidad primordial, inmóvil, que existía antes de la ruptura. Eso es lo que hacen los hathayoguis al unir el "Sol" con la "Luna". Este acto paradójico se efectúa a varios niveles a la vez; mediante la unión de Shakti (kundalini) con Shiva en su propio cuerpo, se obtiene la inversión del proceso cósmico, la regresión al estado indiferenciado de la Totalidad original; "fisiológicamente", la conjunción Sol-Luna se traduce por la "unión" de prana y apana, es decir, por una "totalización" de los hálitos, en suma, mediante su detención. Finalmente, la unión sexual, mediante una cierta postura (vajrolimudra) lleva a cabo el "retorno del semen".

Unidad (Mircea Eliade)

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Erotismo místico en la India
Mircea Eliade (Bucarest, Rumania, 9 de marzo 1907 - Chicago, USA, 22 de abril 1986)

Editorial Kairós, 2002



Desde su primer viaje a la India en 1928, Eliade no dejó de estudiar los misterios y los ritos indios. En 1956, el historiador de la religiones escribió Sobre la erótica mística en la India que trata de este aspecto primordial de la religión hinduísta, según la cual «toda mujer desnuda encarna la Naturaleza».
Mircea Eliade, uno de los más grandes historiadores de la religión del siglo XX, ha sido profesor en la Universidad de Bucarest, en la Sorbonne de Paris y en la Universidad de Chicago.

sábado, 20 de agosto de 2016

Perseverancia (Yoka Daishi)

Si comprendes que las palabras
desagradables se convierten en méritos,
entonces son para ti
un maestro de la Vía.
Si, por medio de las críticas, no despiertas
más allá de la noción de amigo o enemigo,
¿cómo podrás hacer realidad
los poderes ilimitados (musho)
de la compasión
y de la perseverancia (jinin)?


Musho y jinin son dos aspectos importantes del budismo Mahayana. Musho, literalmente lo "no-nacido", sin nacimiento, así que sin muerte, lo eterno, lo ilimitado.
Jinin:  Compasión y perseverancia que caracterizan al Bodhisattva.
En general las críticas provocan cólera en nosotros. ¿Por qué? La crítica puede educarnos, es una enseñanza del cielo.
El amigo se convierte en enemigo y el enemigo en amigo. Si tienes un enemigo que desea matarte o hacerte daño, estás tenso, a la defensiva, la vida se vuelve importante, concentrada, profunda y auténtica. Aquí y ahora existes con fuerza.
La vida se muestra a veces injusta, ¿es esto malo? Demasiado calor o demasiada felicidad hace que el cuerpo y la mente se deshagan como un azucarillo. Sólo hay que ser honrado con uno mismo, severo con uno mismo y practicar realmente en uno mismo. De esta manera la persona que te critica se convierte en tu maestro mucho más que la que te admira.
Los dos últimos versos del poema son muy importante. Si gracias a la crítica vamos más allá de la noción de amigo y de enemigo, si no nos oponemos a aquellos que nos critican, si no nos unimos en exceso a aquellos que nos admiran, sin duda podremos hacer realidad el poder ilimitado de la compasión y la perseverancia.
Este poder de compasión y perseverancia es la experiencia de lo lo inmortal, de lo ilimitado, de lo infinito.
Hay numerosos sutras sobre este poder, característico del Bodhisattva que no quiere ser Buda o, al menos, que quiere seguir siendo un Buda vivo en el mundo para ayudar a los demás. Con respecto a sí mismo, persevera. Para los demás es amor. Una cosa conlleva a la otra.

Perseverancia (Yoka Daishi)

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El canto del inmediato satori
Yoka Daishi (Wenzhou -China-, 665 d. C - 713 d. C)

Vision Libros, 1981

 
El canto del inmediato satori, el Shodoka, compuesto de 78 poemas, está considerado como uno de los textos fundamentales del Zen. Lo escribió en el siglo VIII de nuestra era el Maestro Yoka Daishi, el cual nació en China en el año 665 y, monje a los veinte años, se volcó en el estudio de las diferentes formas de budismo y del pensamiento taoista y confucianista. Pero la duda permaneció en él hasta que conoció a Hui Neng (Eno, en japonés), el sexto Patriarca, quien le transmitió en una noche la esencia del Chan, el verdadero espíritu del Zen. Tuvo numerosos discípulos. Murió en el año 713 en postura de zazen.
Su único legado a la humanidad fue el Shokoda, este canto que, por su frescura y su fuerza, sigue siendo más actual que la mayoría de los textos tradicionales.
El canto inmediato satori es una pura joya poética y espiritual. Encierra una sabiduría universal. El Maestro Taisen Deshimaru lo tradujo y lo comentó para guiar al ser por el camino del despertar.

viernes, 22 de abril de 2016

Actuar (Henri Borel)

Escucha ahora lo que voy a decirte de Wu Wei, del No Actuar, del Dejar Ir al ritmo que procede de Tao. Los hombres podrían ser verdaderamente hombres si se dejaran ir como hacen las olas del mar, como florecen los árboles, en la simple belleza del Tao. En todo hombre hay un impulso a moverse que procede de Tao y que tiende a devolverlo a él. Pero los hombres se dejan cegar por sus sentidos y sus deseos. Son ellos los que quieren la voluptuosidad, la alegría, el odio, la fama y las riquezas. Sus movimientos toman la violencia de la tempestad desencadenada; su ritmo es un ascenso furioso, seguido de una precipitada caída. Desesperados, se atan a todo lo que es irreal. Desean demasiado la multiplicidad como para desear al Único. También quieren la sabiduría, y la bondad, y esto, es lo peor de todo. Sólo hay un remedio: el retorno a nuestros Orígenes. Tao está en nosotros. Tao es el reposo. Sólo podemos llegar hasta él dejando de tender hacia él, y lo mismo ocurre con la bondad y la sabiduría. ¡Ay, esos deseos inflamados de conocer Tao! ¡Esta triste pena que consiste en buscar palabras que lo expresen o lo imploren! El verdadero Sabio contempla la Doctrina inefable, que nunca será expresada. Por otra parte, ¿quién podría expresar Tao? Los que saben (qué es Tao) no lo expresan; aquellos que lo expresan, lo ignoran.
Tampoco yo te diré que es Tao. Lo descubrirás por ti mismo, liberándote de todo deseo, de toda emoción, viviendo sin esfuerzo, sin acción alguna que esté en oposición con la naturaleza. Con un movimiento tan calmo, tan regular como el del Océano que está delante de nosotros, has de dejarte llevar hasta Tao. El mar no se mueve porque sea su voluntad, ni porque sepa que es bueno o sabio moverse. Se mueve porque se mueve, y no tiene ninguna conciencia de ello. Así, del mismo modo, fluirás hacia Tao, y cuando hayas alcanzado el objetivo, no sabrás nada, pues tú mismo serás Tao.

Actuar (Henri Borel)

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Wu Wei (la vía del no actuar)
 Henri Borel (Dordrecht, 23 de noviembre 1869 - Den Haag (Holanda), 31 de agosto 1933)

Ediciones Obelisco, 1998

El universo es un vasto santuario, no encontrarás otro cobijo más seguro.
¿Por qué no quieres darte cuenta de hasta qué punto la muerte, como la vida, es un fenómeno natural? Descubrirás el sentido de la existencia si logras liberarte del deseo, vivir sin esfuerzo y sin perseguir acción alguna que esté en oposición con la naturaleza.
Wu Wei es una de esas pequeñas obras maestras de la literatura espiritual que se leen y releen con emoción. El protagonista dialoga con un anciano sabio, Lao-Tzu, quien le introducirá en los misterios del Tao. Ameno, sencillo y poético, este libro es particularmente revelador al plantear la concepción taoísta del arte y del amor. Su lectura revela que los hombres podrían ser verdaderamente hombres si se dejaran ir como hacen las olas del mar.

lunes, 7 de marzo de 2016

Iluminación (Mariana Caplan)

Cuando algo llega a popularizarse tanto como ha sucedido actualmente con la iluminación, se pierde la esencia de su significado, pues los principios verdaderamente espirituales no pueden comunicarse de forma masiva. No es posible lo que pretenden las filosofías de la Nueva Era, es decir, que estamos en una era de evolución en la que todo el mundo puede alcanzar fácilmente la iluminación que antes sólo era accesible a unos pocos. En ningún momento de la historia, incluyendo la actual "Nueva Era", las masas han tenido ganas de adoptar el compromiso necesario para lograr una vida iluminada.
Un análisis de la presunción de iluminación no puede ser completo sin antes clarificar la aguda distinción que ha de realizarse entre la espiritualidad Nueva Era y los senderos de liberación tradicionales de los que se ocupa este libro. La mayoría de las filosofías y psicologías de la Nueva Era ofrecen modos de seguir más cómodamente en el sueño del ego y nos enseñan cómo sentirnos mejor dentro de la ilusión de nuestras vidas, mientras que las disciplinas auténticamente espirituales nos enseñan cómo atravesar ese sueño. Esto ha de quedar muy claro, pues los términos "espiritualidad" e "iluminación" han llegado a ser tan populares que la mayoría de la gente asume que los psíquicos, los pseudochamanes y los sanadores con cristales están haciendo lo mismo que los maestros zen, los maestros tántricos Vajrayana y los shaylls sufíes tradicionales, y los agrupan todos bajo el paraguas de la "espiritualidad". Esto constituye un flaco servicio tanto a los maestros como a uno mismo.

Iluminación (Mariana Caplan)
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A mitad de camino
Mariana Caplan (Washington D.C., 18 de junio de 1969)

Editorial Kairós, 2004


Sobre "A mitad de camino" se ha escrito:
«Un libro enormemente valioso y atinado, especialmente en las partes dedicadas a las cuestiones "candentes" de la autenticidad, el ego, la inflación y la corrupción de los maestros espirituales.» -Library Journal
«El iluminador libro de Caplan cuestiona los motivos de los encantadores de serpientes de la era moderna en el terreno espiritual y urge a los buscadores a pagar el precio de viajar por el camino arduo hacia la verdadera iluminación.» -Publishers Weekly
«En la gran mezcla de la escena espiritual contemporánea, algunas personas están volviéndose más sabias y compasivas, y muchas otras están explotando a los demás, embarcadas en viajes ególatras, empeorando nuestro "oscurecimiento" y nuestro samsara...» -Charles Tart
Efectivamente, "A mitad de camino" revela enérgica y valerosamente las graves distorsiones y fraudulentas aspiraciones al poder que contaminan la escena espiritual de nuestro tiempo. Docenas de entrevistas de primera mano con estudiantes, profesores y maestros espirituales, además de una amplia labor de investigación, son sintetizados aquí para asistir a los lectores a la hora de evitar los escollos de un camino peligroso.

jueves, 22 de octubre de 2015

Serenidad (André Van Lysebeth)

Es evidente que no logrará de inmediato que sus meditaciones sean perfectas. Surgirán distracciones en su mente. No se preocupe. En este dominio, como en el yoga físico, la perseverancia es lo que asegura el éxito. Si su mente vagabundea durante su meditación, condúzcala gentilmente al lugar donde quiere que se mantenga. No se sorprenda de esas distracciones: sólo los yoguis pueden permanecer concentrados durante largos minutos sin distraerse. Sin embargo, desde los primeros ensayos obtendrá beneficios en forma de aumento de calma durante todo el día, de un comienzo de paz. Hay que practicar con indiferencia respecto a los resultados: los cosechará a su tiempo.
La calidad de las meditaciones varía mucho de un día a otro: es normal. La práctica es lo único que cuenta: "una onza de práctica vale más que toneladas de teoría". Se sentirá progresivamente penetrado de serenidad y comprenderá las siguientes frases de Nietzche:
La serenidad es el fundamento de cualquier acción eficaz, el fundamento de la felicidad.
Esta serenidad es lo propio del hombre en quien el "yo" ha cedido su lugar al "sí-mismo". La ansiedad es la suerte de los que no conocen sino su pequeño "yo", débil y limitado, presa del mundo cruel exterior, desarmado ante las catástrofes y las dificultades, presa de las preocupaciones. La serenidad la posee quien ha comprendido que "Instrumentos y juguetes son el sentido y el espíritu: tras ellos se encuentra todavía el sí-mismo. El sí-mismo busca también con los ojos de los sentidos, escucha también con los oídos del espíritu. El sí-mismo escucha siempre y busca siempre: compara, subyuga, conquista, destruye. El sí-mismo domina y es el dominador también del yo.
Detrás de tus pensamientos y sentimientos, hermano mío, se encuentra un soberano poderoso, un sabio desconocido, llámase sí-mismo. En tu cuerpo habita, es tu cuerpo
." 
(Así hablaba Zaratrustra. Friedrich Nietzsche)


Serenidad (André Van Lysebeth)

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Perfecciono mi yoga 
André Van Lysebeth (Perpiñán (Francia), 11 de octubre de 1919 - 28 de enero de 2004)

Ediciones Urano, 2009


Uno de los títulos de referencia para los practicantes de este delicado arte, firmado por el autor de "Aprendo yoga", el gran impulsor de sus técnicas milenarias en occidente. Con la precisión y claridad características de sus obras, el maestro Van Lysebeth invita a los lectores a incorporar a su sesión diaria las prácticas de yoga más avanzadas, incluidas la técnica secreta del Kaya-Kalpa, para rejuvenecer el cuerpo, y la meditación yóguica. Para Van Lysebeth, perfeccionar el yoga no consiste en complicarlo sino en hacerlo más eficaz, útil y beneficioso. Este clásico de nuestro tiempo permitirá a cualquier persona, en su propia casa y con toda comodidad, recuperar el equilibrio físico, psíquico y espiritual mediante destrezas reservadas hasta hace poco para los grandes maestros. Una obra capital, que ha ganado en importancia conforme la práctica del yoga se ha ido extendiendo.

lunes, 5 de octubre de 2015

Tortuga (Swami Saradananda)

Debajo del chakra de la garganta y encima del chakra del corazón hay un chakra menor con un patrón de energía radiante que se asemeja a una tortuga, o kurma en sánscrito. La meditación en este centro de energía aporta calma que a veces se aproxima a la paz de la hibernación.
La tortuga es el símbolo universal de estabilidad y resolución firme. Una vez decide esconder la cabeza y las patas, nadie ni nada le puede hacer cambiar de opinión. En la mitología hindú es una tortuga la que aguanta el universo. Sus cuatro patas, la cabeza y la cola pueden ser una analogía de los cinco sentidos más la mente. La capacidad de la tortuga para ocultar sus extremidades y estar en paz consigo misma es un símbolo de la práctica de pratyahara en el yoga. Aunque suele traducirse como "retirada de los sentidos", esta práctica se describe mejor como la retirada de la energía mental de los sentidos.
Los sentidos son como aparatos eléctricos que sólo funcionan cuando se enchufan a una fuente de energía. Si, por ejemplo, estás absorto en un libro, quizás no oigas el teléfono: a tus oídos no les pasa nada, pero tu energía mental está siendo canalizada hacia tus ojos. En el pratyahara "desconectas" adrede tus sentidos de su fuente de energía. Cuando te sientes para iniciar la meditación, intenta desconectar los sentidos. No dejes que la energía viaje de tu mente a tus ojos, nariz, oídos, piel o boca, ni a tus manos ni pies (la palabra sánscrita para los sentidos incluye a los órganos de la acción). Esto significa que dejas de ver, oler, oír, palpar, moverte o trabajar. Cuando la energía mental ya no escapa, estás practicando pratyahara y asumes las cualidades de la firme y tranquila tortuga.

"Con la concentración firme en la tortuga sita en el hoyo de la garganta se consigue la calma total de cuerpo y mente".
Patanjali. Sutras de Raja Yoga, 3.31


Tortuga (Swami Saradananda)

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Meditación en los chakras 
Swami Saradananda (
Calcuta, India, 23 de diciembre de 1865 - 19 de agosto de 1927)

Ediciones Obelisco, 2014


Descubre la energía, la creatividad, la concentración, el amor, la comunicación, la sabiduría y el espíritu. Incorpora a tu vida los beneficios de la meditación y domina la liberación de nuevas habilidades bajo la orientación de una gurú de la meditación. Descubre cómo aumentar tu tranquilidad, potenciar tu creatividad, mejorar tus habilidades comunicativas, etcétera, todo ello mediante ejercicios sencillos pero eficaces para los chakras. Con instrucciones fáciles ésta es la guía de meditación perfecta para principiantes, así como para practicantes más experimentados.
La autora fue editora de la revista Yoga life y directora de los Centros de yoga Sivannanda en Nueva York, Londres y Nueva Delhi. Ahora reside en Londres, y ha enseñado meditación y yoga en centros de todo el mundo, además de dirigir peregrinaciones anuales a la India. Es autora de "The power of breath" y "Chakra meditations deck".

domingo, 6 de septiembre de 2015

Distracción (Joseph Goldstein)

El primer paso de la meditación es calmar la mente y recoger la atención. La importancia de ello se revela en los inicios de la práctica; a menudo es la primera visión interior que logramos cuando empezamos a practicar la meditación. Nos damos cuenta por nosotros mismos de lo difícil que es controlar la mente. La mente es muy resbaladiza. Percibimos una respiración o dos, y luego la mente empieza a vagabundear. Nos vemos seducidos o distraídos por pensamientos, planes y recuerdos, en ocasiones, incluso desagradables. A menudo hacemos que vuelvan a cobrar vida viejas disputas o prejuicios. Saltamos a un tren de asociaciones, no sabiendo dónde nos hemos metido y sin tener ni idea de a dónde se dirige el tren. En algún lugar de la vía, nos despertamos del sueño de nuestros pensamientos, en ocasiones en una atmósfera mental totalmente distinta. Tal vez nos hayamos enredado en algún drama, en alguna emoción fuerte, o nos hemos contraído en una fuerte sensación de sí mismo, de ego. Durante todo el tiempo, no es más que el juego de nuestras mentes.
Adiestrar la mente es un poco como enseñar a un cachorro a sentarse. Lo hacemos sentarse y, poco después, está saltándote por encima, lamiéndote la cara y las manos. Vuelves a hacer que se siente: "siéntate, siéntate" ,y, de nuevo, en unos pocos instantes, está corriendo. Pero, con amable persistencia y dedicación, con el tiempo el cachorro aprende a quedarse quieto y a sentarse. Nuestras mentes se parecen mucho a este cachorro.
Unos versos del Dhammapada nos recuerdan que esta mente que vagabundea era igual en tiempos de Buda que ahora:

La mente se agita, es difícil
de controlar. El sabio la pone recta,
como un hacedor de flechas
endereza una flecha.

Por lo tanto, empezamos con un simple objeto de atención, como la respiración, y nos adiestramos a volver a ella aunque nos distraigamos una y otra vez. La primera visión profunda del hábito de la distracción nos conduce a comprender el valor y la importancia de fijar nuestra atención, puesto que los mundos que creamos en nosotros mismos y a nuestro alrededor tienen su origen en nuestras propias mentes.


Distracción (Joseph Goldstein)____________________________________________________________________________
 
Un único Dharma
Joseph Goldstein (New York,
20 de mayo de 1944)
 
Editorial La liebre de marzo, 2005

En Un único Dharma, Joseph Goldstein nos introduce en una visionaria síntesis que apunta a un camino para que el budismo crezca y florezca en Occidente, mientras sigue enraizado en las enseñanzas de las grandes escuelas asiáticas: de India a Birmania y del Tíbet al Japón. Con una simplicidad derivada de la propia respuesta pragmática de Buda a la vida, Goldstein destila el tema fundamental que está en la base de todas las tradiciones: ¿Qué es lo que funciona a la hora de liberar la mente del sufrimiento?

domingo, 9 de agosto de 2015

Pasado (Thich Nhat Hanh)

El presente contiene el pasado. Cuando comprendemos que nuestras formaciones internas nos provocan conflictos, vemos que el pasado se encuentra en el momento presente y entonces deja de abrumarnos. Cuando el Buda dijo: "No persigáis el pasado", nos estaba diciendo que no nos dejáramos abrumar por él. No quería decir que nos olvidásemos del pasado para observarlo más a fondo. Si cuando rememoramos el pasado y lo observamos a fondo nos afianzamos en el presente, dejará de abrumarnos. Los materiales de los que está hecho el pasado y de los que se compone el presente, se revelan con claridad al expresarse en el presente. Podemos aprender de ellos. Si observamos esos materiales a fondo, los comprenderemos de otra forma, lo cual se llama "observar de nuevo algo antiguo para aprender algo nuevo".
Cuando sabemos que el pasado también se encuentra en el presente, comprendemos que podemos cambiar el pasado transformando el presente. Observarlos a fondo, reconocer su naturaleza y transformarlos, es transformar el pasado. Los fantasmas del pasado son muy reales.  Son las formaciones internas que hay entre nosotros, las cuales algunas veces están durmiendo silenciosamente en nuestro interior y, otras, se despiertan de pronto y  actúan con gran fuerza.
En el budismos existe el término sánscrito anusaya. "Anu" significa "junto con" y "saya" "yacer". Anusaya podría traducirse como "inclinación latente". Las formaciones internas siguen estando en nosotros, aunque yazcan dormidas en el fondo de nuestra conciencia. Las llamamos fantasmas, pero están presentes de una forma muy real. Según la escuela  vijñanavada del budismo, los anusaya son las semillas que yacen en el alaya, la conciencia-receptáculo de cada uno de nosotros. Una parte importante de la labor de meditación observadora consiste en reconocer los anusaya cuando se manifiestan, observarlos a fondo y transformarlos.


Pasado (Thich Nhat Hanh)

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Cita con la vida
Thich Nhat Hanh (
Thừa Thiên-Huế (Vietnam), 11 de octubre de 1926 - 22 de enero de 2022)

Ediciones Oniro, 2004


«Nuestra cita con la vida tiene lugar en el momento presente. Nuestra cita se encuentra aquí, en este mismo lugar.» De hecho, si hubiera que resumir la esencia de la práctica budista, la frase idónea para hacerlo sería «vivir en el presente». El monje budista vietnamita Thich Nhat Hanh nos ofrece en estos sutras las primeras enseñanzas de Buda sobre cómo vivir siendo consciente del aquí y el ahora, puesto que es únicamente en el momento presente donde reside la vida. En efecto, el pasado ha dejado de existir y el futuro aún está por llegar, de manera que sólo el presente puede proporcionarnos la oportunidad de hallar la paz y el despertar. Debemos desprendernos de los fantasmas del pasado y el futuro y acercarnos a la verdadera naturaleza de las cosas.

miércoles, 29 de julio de 2015

Burbuja (Chögyam Trungpa)

No se trata sólo de negar la existencia del ego, porque el ego es algo relativo. Cuando se piensa en una persona exterior o en un ser superior, cuando se tiene el concepto de algo separado de uno mismo, se tiende a pensar que, dado que algo existe fuera, también tiene que haber algo en nuestro interior. El fenómeno exterior a veces se convierte en algo abrumador y parece poseer toda clase de cualidades seductoras o agresivas, por lo que erigimos una especie de mecanismo de defensa frente a él, sin conseguir entender que este mecanismo es en sí mismo una continuidad del hecho externo. Intentamos aislarnos del exterior, lo que crea en nosotros una gigantesca burbuja que consiste nada más que en aire o en agua o, en este caso, en el miedo y reflejo de la cosa externa. Esta inmensa burbuja impide que entre el aire fresco: es el "yo", el ego. En ese sentido, puede hablarse de la existencia del ego, pero en realidad es ilusorio, porque generalmente queremos crear algún ídolo o refugio externo. En nuestro subconsciente, sabemos que este "yo" sólo es una burbuja que puede estallar en cualquier momento, por lo que intenta protegerlo todo lo que puede, ya sea de forma consciente o inconsciente. De hecho, hemos adquirido tal habilidad para proteger este ego, que hemos conseguido preservarlo durante cientos de años. Es como si una persona tuviera un par de gafas de gran valor que guarda en una caja u otro tipo de estuche para tenerlas a salvo, de modo que, aunque se rompieran otras cosas, esta quedaría intacta. Esa persona sabe que otros objetos pueden sufrir daños, pero no sus gafas, que durarán mas. De la misma forma, el ego dura más sólo porque tenemos la sensación de que puede estallar en cualquier momento. Se tiene miedo de que quede destrozado en cualquier momento. Se tiene miedo de que quede destrozado porque sería demasiado, nos sentiríamos demasiado expuestos. Establecemos fuera de nosotros un determinado personaje, un modelo maravilloso, aunque en realidad es nuestro propio reflejo. Por eso, la idea de la ausencia de ego no plantea la cuestión de si existe o no un yo, o, para el caso, de si existe o no Dios; se trata de eliminar el concepto de burbuja. Una vez hecho eso, no hay que destrozar el ego o condenar a Dios de forma deliberada. Y cuando se ha traspasado esa barrera, uno puede traspasarla y extenderse más allá. Esto sólo puede conseguirse mediante la meditación, que debe emprenderse de una manera muy sencilla y práctica.


Burbuja (Chögyam Trungpa)____________________________________________________________________________

Meditación en la acción 
Chögyam Trungpa (Kham (Tíbet), 28 de febrero de 1939  - Halifax (Canadá), 4 de abril de 1987) 
 
Editorial Kariós, 2012

Esta obra es ya un clásico que sigue inspirando tanto a principiantes como a avezados practicantes de meditación budista. Chögyam Trungpa, uno de los maestros budistas contemporáneos más destacados, nos enseña que la auténtica meditación va más allá de una práctica pasiva circunscrita a una determinada postura o limitada a unos momentos concretos del día.
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